Entregarme a ti
- Jenny G.
- 7 feb 2016
- 4 Min. de lectura

¡La única opción que queda! es presentarme sorpresivamente, es entregarme a ti, arrodillarme, humillarme, ofrecer mi cuerpo cubierto en telas finas suaves, ligeras, esas prendas que tantas caricias provocaron, esas prendas que tantas miradas de morbo y asombro te robaron al saber que siempre fueron escogidas estratégicamente para saborear tus manos, tus caricias, tu obscenas miradas, que hacían escurrir mi jugos atreves de mis blancas y suaves piernas.
Si tendré ir a rogarte hincada, frente a ti, con mis ojos grandes viéndote a los tuyos, pidiendo piedad, pidiendo a ti mi macho que me eduques de nuevo que me tomes en tus brazos, que amoldes de nuevo mi cuerpo a tus deseos, a tu anatomía fálica.
No puedo Humillarme más amante mío, dedicarte esta fría mañana, arrodillada aquí casi en público en el estacionamiento de tu trabajo, con la obscuridad como testigo y los primeros rallos de luz como cómplice, ya tengo todo planeado, mi mente divaga y me doy cuenta que mis manos ya juguetean bajo mi vientre, solo de pensarlo se eriza la piel, siento escalofríos, electroshocks pequeños en mi vientre, punzante, contrayéndose de solo recordar tus manos posicionándome en el filo de la ventana, donde grite y gemí la última vez que estuvimos juntos.
Tendré que posar ante ti con zapatillas altas, afiladas, aquellas de flores que tanto te gustan por estilizar mi figura y poner respingado mi trasero, mismo que resbala atreves de la tela del vestido satinado color purpura acompañado de pantimedias brillosas suaves, tersas a tu tacto, agarradas a mi cuerpo coquetamente por este ligero blanco que hace juego con la diminuta tanga, vamos deja mostrarte el corsette blanco que eleva mis senos, los muestra, frondosos, accesibles, jugosos esperando tus besos tu lengua, la cual también es anhelada por mis labios , mueren por ser devorados, mordidos salvajemente y compartir contigo mi labial rosa con destellos plateados, las ansías se vuelven en suspiros por mi debilidad de estar de nuevo secretamente entregada a ti, quiero acabar con el brillo de mis labios dejando un camino por tu cuerpo y terminar de nuevo arrodillada con tus manos en mi cabeza dirigiendo el cómo entinto tu pene reconciliándonos dulcemente al son de una buena y dulce mamada, todo esto complementa este regalo este tributo.
Hoy visto esta armadura suave y dedico cada centímetro de mi piel a tus deseos, pienso entregarme a ti en esta batalla y todas las que desees tener junto a mí en este camino que pienso sembrar de orgasmos y recordar que ya perdí esta guerra desde hace un par de años cuando nos dedicamos orgasmos en la cama de mi novio hoy mi esposo.
Tendré que rogarte arrodillada frente al miembro que tantos placeres me provoca, frente al culpable de mi adición, de mi gusto adictivo de tenerte entre mis piernas, aquí me tienes con los ojos llorosos tiernos, húmedos como mi vagina sollozando de felicidad al verte.
Te extraño, te quiero de nuevo dentro mío, quiero de nuevo saborear tus caricias furtivas, tus dedos penetrándome, venga toma la correa metálica que traigo en el cuello y presiónala lentamente en señal de que ya soy otra vez tuya.
llévame lejos a gritar a un hotel y déjame mostrarte mi felicidad, brincando como niña pero como mujer en tu inmensa verga rosada clavándose en mi vagina, mostrándote mis ganas de ser tuya nuevamente, vamos hazme gemir tu nombre entre jadeos, amolda de nuevo este goloso útero, has que recuerde el dolor de tenerte dentro mío educándome, emputeciendome, vamos róbame el aliento con tus besos en mi cuello y tus mordidas violentas en mis labios, ven déjate llevar, déjame mostrarte como mis tetas vibran por tener de nuevo esa lengua violadora y esa boca succionante, quiero dedicarte mis incendiantes orgasmos múltiples y que te alimentes como crío de mis pechos.
Clava tus manos en mi cabello, y educa mis nalgas azotándolas al ritmo sádico de tus caderas, no pares hasta que la presión de tus golpes en mis nalgas cambien de color mi piel blanca, vamos usa tus fuertes y ásperas manos para callarme, vamos obsequia una elegante gargantilla delineando mi cuello con un apretón de tus garras, regáleme marcas de guerra estragos indelebles de pasión, edúcame, recuérdame que soy tuya a cada minuto, graba en mi la sentencia "que donde sea y con quien esté seré siempre tuya"
Vamos mi macho penétrame dolorosamente, enséname a diferenciar del dolor dulce, al dolor sádico, mézclalos muéstramelos, muerde mi cuello lame mi oído, sigue bombeando tu jugoso néctar incendiante a mi interior, necesito que inundes de ti este vientre tan goloso, que ya se retuerce, vibra, se contrae al son de tus jadeos, la conexión ya está efectuada atreves del sudor y el roce de nuestra pieles, cada jadeo aquí me tienes regalándote orgasmos como un celoso regalo, que con esmero te dedico contrayendo e alrededor de tu gorda verga envolviéndola, venga muéstrame que no necesitas permiso para inundarme, pues soy tuya.
Comments